lunes, 22 de noviembre de 2010

COMUNICACIÓN Y EDUCACIÓN: LA POSIBILIDAD DE LA ESCUELA EN UN ECOSISTEMA COMUNICATIVO

Desde la conceptualización de Jesús Martín Barbero nos encontramos con planteamientos que se han venido configurando desde diferentes escenarios en los que se ha dado la investigación comunicación-educación especialmente en Colombia y Latinoamérica.

Nos interesa de esta manera resaltar los planteamientos que este autor realiza desde diferentes textos e investigaciones, especialmente en el texto “La educación desde la comunicación” donde la educación ya no es pensable desde un modelo escolar que se halla rebasado tanto espacial como temporalmente por concepciones y procesos de formación correspondientes a las demandas de la sociedad-red (Castell, 1998), la modernidad hoy nos introduce a la era informacional. En este sentido hoy “la edad para aprender es todas” (Barbero, 2003), y el lugar puede ser cualquiera; una fabrica, una empresa un hospital. Esto quiere decir que estamos pasando de una sociedad con sistema educativo a una sociedad educativa, esto es cuya red educativa lo atraviesa todo: el trabajo y el ocio, la oficina y el hogar, la salud y la vejez. (Barbero, 2003).




Desde esta perspectiva podríamos decir que “estamos ante la formación de comunidades hermenéuticas que responden a nuevos modos de percibir y narrar la identidad, y de la conformación de identidades con temporalidades menos largas, más precarias pero también más flexibles, capaces de amalgamar, de hacer convivir en el mismo sujeto, ingredientes de universos culturales muy diversos” (Barbero, 2002, p. 10).








Desde esta perspectiva vemos que los jóvenes están produciendo un descentramiento tanto de la autoridad de la familia como de la autoridad de la escuela en el momento de la producción de sujetos. El concepto de descentramiento aquí es muy importante. Entonces, siguiendo a Barbero (2003) se están produciendo dos tipos de saberes; unos saberes mosaicos distintos a los saberes lectivos, eso no quiere decir que entremos nuevamente en una oposición ahora de saberes, pues una cosa es el saber lectivo, el saber que la escuela trasmite oficialmente, y otra cosa son los saberes mosaicos, son esos saberes diseminados por el mundo del internet, por el barrio, por los grupos de amigos, por la discoteca. Esto simplemente nos invita a una reorganización de la comprensión del sujeto de la educación, en palabras de Barbero “la nueva realidad propone una re-definición del sujeto de la educación.

Esto también tiene que ver con el concepto de diseminación que maneja Barbero. Aquí hay dos autores que nos están haciendo una constatación sobre el descentramiento de la escuela, y la producción de unos saberes mosaicos, distintos a unos saberes lectivos, o la construcción de estéticas de sujeto por fuera de la escuela, distinta a las estéticas de sujeto que ella misma propone.

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